Playa del Carmen

Para llegar hasta allí tomé un camión en Cancún, el trayecto tenía una duración de 1 hora o algo así. No era muy incómodo pero hacía un frío del carajo. Suele pasar que en la calle te estas asando pero literal, y en los sitios cerrados hace un frío para morirse.... No había termino medio. Era estar sudando constantemente, no había tregua, nunca había pasado tanto calor en mi vida, creo que lo de España ya no me va a parecer calor.
Bueno que me desvío, la estación de autobuses estaba al final de la famosa "Quinta Avenida", una calle llena de vida y en cada rincón encuentras algún sitio especial. Todo está enfocado para los estadounidenses, precios en dolares, carteles en inglés etc.

Recuerdo ir andando por la avenida y un mexicano me dice "oye amigo tengo marihuana", le contesto "no gracias" y mientras me estoy yendo me grita ¡español, tengo farlopa! XDDD

El hostal estaba situado en un lugar privilegiado, a 5 minutos de la playa y en la misma avenida prácticamente. Un lugar orientado por y para jóvenes, con unas piscina arriba en la azotea y un bar donde trabajaban una española (Olé) y una finlandesa (ojo como estaba). Mi habitación era compartida con 11 personas más, tanto hombres como mujeres, al principio se me presentó un suizo y un indio, pero nada comparado con lo que vendría después.
La playa era una gozada, poder refrescarte, tomar el sol en aquella arena blanca y el ambiente hacía de ella un lugar maravilloso. Aunque el agua estaba un poco sucia, yo intentaba ir a las zonas más limpias y menos masificadas.

Ya por la tarde fui a ver el casi recién ignagurado Portal Maya en el límite de la avenida, un homenaje a la profecía del fin del mundo. Además coincidí con una exhibición de danza maya. 

Ya en noche me cambié y subí arriba a la azotea al bar, con una coronita en mano (Llamada Corona en todos los lugares del mundo menos en España)  y conocí a Ali Mason un tío de lo más simpático que venía de San Diego pero hablaba muy bien español. Me presentó a mucha gente, a su amiga Doris, a Chahin, un mexicano muy agradable, a Axel un francés y a Marcos un argentino.  Salimos a un antro por la noche y estuvo muy padre, parecía como si nos conociéramos de mucho tiempo, fue una gran noche. (El argentino invitándome a cervezas daba gusto).

Lo malo es que al día siguiente tenía planeado ir a la isla de Cozumel, me quedé dormido y perdí el ferry. Pero era cuestión de improvisar el día y listo. Se solución con ir de compras y a la playa todo el día.
Por la tarde nos colamos en la piscina de un hotel y estuvimos tomando un cóctel rodeados de unas vistas espectaculares. Por la noche otra vez en la terraza con un gin tonic y me dieron a probar por primera vez el tequila. Al día siguiente nos fuimos Axel, Chahin y Doris a las ruinas de Tulum, agarramos un colectivo y allá que fuimos. Como ruinas son las más bonitas de las que visité, con el azul mar de fondo y la playa a los pies. El Templo del viento es lo más conocido allí, pero lo que lo hace más increíble aún es poder bañarte a los pies de las ruinas en un playa de arena blanca preciosa. Estaba llenísimo de españoles =)

A la vuelta aprovechamos para hacer una parada en Akumal, playa famosa por sus tortugas. Axel y Doris hicieron snorkel mientras Chahin y yo nos quedamos con las cosas en la playa.

Nada más volver a Playa del Carmen lo primero que hicimos fue irnos a comer Doris, Chahin y yo a una taquería famosa, era muy tarde pero da lo mismo porque aquí en México la gente come a todas horas XD

Unos buenos tacos al pastor y un agua de jamaica para dejarte como nuevo. Por la noche caí rendido en un momento. 

voladores

En la mañana tocaba volver a hacer la maleta e ir a VALLADOLID, pero antes me fui a despedir de Ali, Dori, Marcos y Chahin, amigos que espero visitar algún día, a Chahin seguro que le veré en el DF y espero que venga a visitarme a Guadalajara, además ojala pueda ir a Los Ángeles y a San Diego ;) Me dió penilla despedirme de aquel lugar y de esa gente maravillosa. Otra vez tocaba continuar mi camino solo.... ¿O tal vez no?.